miércoles, 25 de marzo de 2009

Mariano José de Larra hubiera cumplido, ayer 24 de marzo, 200 años. Iris M. Zavala ha dicho de él que representa el «romanticismo democrático en acción». ¡Qué necesario sería hoy una Larra en el periodismos español! Un crítico con razones, un satírico con ironía, un estilista del lenguaje bien empleado, directo y natural. En sus artículos combate la mala organización del estado, se burla de la sociedad y rechaza la vida familiar hipócrita de la época. Para él, los males de España son el tema central de su obra crítica y satírica. Descontento con el país y con sus hombres y mujeres, escribe artículos críticos (En este país, El castellano viejo, El día de difuntos de 1836, Vuelva usted mañana...), contra la censura (Lo que no se puede decir no se debe decir), la pena capital (Los barateros o El desafío y la pena de muerte), contra el uso incorrecto del lenguaje (Por ahora, Cuasi, Las palabras).
Leamos a Larra. No solo por su centenario, sino por su obra, hoy está de plena actualidad.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

cabalito, cabalito, velhay, ayer ví cuando paseaba por Madrid y pasé por la casa donde vivió Larra una figura que parecía salir de esta. La figura con apariencia humana no andaba, pues parecia flotar sobre el asfalto. Mirándola bien creí ver en ella a Dolores Armijo. ¿Podría ser?.

Antonio Illán dijo...

Podría ser. Pero Larra no se pegó el tiro por desesperación del amor, sino por el hastío de la vida en general y de la sociedad hipócrita en particular. Además que sería un tío un poco depre.

Anónimo dijo...

Podría ser. Pero no hay que olvidar que el tiro se le descerrajó en su casa al acabar de tener una entrevista con Dolores que había subido a ella, la cual le dijo que prefería la placidez y el sosiego del hogar familiar y que no quería hacer de su marido un Pedro "el aburrio". Luego entonces, el componente amoroso tambien tiene su peso. Hay que ver lo que son las cosas. Seguro que si su marido se hubiera enterado habría dicho "hay que joderse, no poder uno rodear la cabeza".