jueves, 29 de diciembre de 2005

¡FELIZ AÑO 2006!

Venturoso y feliz año nuevo a todas las personas que despiertan en el 2006 sin la resaca de la culpa, llenas de una vida en la que la pasión sobrepasa a la omisión y el gozo teje luces donde la amargura acostumbra a bordar telas de araña.
Feliz año a quienes no ocultan sus afectos ni arrancan de sí las fuentes de donde emanan transparencias y no miran a los que les son cercanos como extraños pasajeros de un viaje sin parada, playas u horizontes.
Que sea nuevo el año para quienes nunca maldicen y contienen la propia lengua, economizan palabras y siembran fragancias en las veredas de los sentimientos. Sea un año hermoso para quienes aúnan fuerzas para mantener enhiesta la bandera de la libertad de expresión. Y sea también feliz para quienes no caen en el abismo de la envidia ni se pierden en oscuridades donde el pavor es apenas el eco de sus propios temores.
Venga renovador el año para los ebrios de poder que nunca tropiezan en impertinencias, para quien no conspiran contra la vida ajena y para quienes no se ostentan en el gallinero de la propia vanidad y saltan con el niño que los habita.
Que vivan el mejor de los tiempos quienes coleccionan utopías, hacen de sus manos arado y riegan con su propia sangre las semillas que cultivan.
La mayor de las venturas a los que traen consigo la casa del silencio y ofrecen en los balcones de su vida chocolate caliente con sonrisas de sabiduría. Hermoso año para los sonámbulos que hacen equilibrios en hilos que unen los corazones y para quienes rebuscan luces en las esquinas de la noche.
Un año nuevo muy feliz para todas las personas que juramos secuestrar los vicios con los que cargamos y no estamos dispuestas a pagar el rescate de la dependencia. El futuro nos encontrará delgados por comer menos, sanos por fumar oxígeno y solidarios por compartir dones y bienes.
Venturoso y feliz 2006 para nuestro país, que es España, y nuestra madre tierra, Castilla-La Mancha, para que sin terremotos, sin violencias ni sequías tengan la mejor vida de libertad solidaria.
¡¡¡VENTUROSO Y FELIZ AÑO PARA TI, LECTOR DE ESTE BLOG, PARA TODAS LAS PERSONAS QUE TÚ QUIERAS Y PARA TODAS LAS QUE TE QUIERAN!!!

miércoles, 21 de diciembre de 2005

¡FELICES PASCUAS!


Paz! ¡paz!, se oye en la penumbra que iluminan las estrellas y tras las ventanas, donde los amantes beben besos en silencio, y en las llanuras, donde el viento hace ondear las espigas y los pájaros imaginan mares verdes o dorados, y en los valles, donde la bruma se mece y susurra sus cantos la oropéndola, y en las hogueras, donde nunca se queman las oraciones ni sufre tormento la esperanza, y en el mar del aire, donde los cauces de nieve lloran de alegría lágrimas que se deshacen en la mano. Sin embargo algún dolor se escapa (ese dolor, no me preguntéis cuál, que nunca se contempla en el espejo), y se diluye poco a poco, poco a poco, como lo hace el eco, y se va perdiendo, perdiendo, quedando, perdiendo, quedando en lánguido lamento. (El lamento recuerda que fue grito, no hablo del grito cavernario, pues también encuentro música en el grito). No sorprenda que en el aire permanezca, peregrino, el consuelo, (en la memoria del aire) y en el infinito horizonte del deseo.
¡Paz! ¡paz!, es la melodía que se multiplica en el espacio, todo lo que alienta la repite, la repican los pasos de los gatos sobre los tejados, el aullido de los lobos, el runrunear de las abejas, el sostenido canto de los delfines y el agua de los torrentes que lame las riberas. (Y el hombre, ¿qué grita el hombre? ¿qué canta el hombre cuando calla? No me digáis que brama el hombre o es alarido el manantial que libera su contienda). Un frío intenso cruza los rostros, como un nombre que nunca pudiera olvidarse, pero hay residuos de ternura -hagamos permanente llamada al optimismo- que crecen y espejos que reflejan la belleza. Hay paisajes en los que la soledad es compañía y su sosiego invita a alzar la voz y a arroparse en el esplendor de la sonrisa.
¡Paz! ¡paz!, entonan los ángeles que huyen como soplos, como secretos testigos del alma de los pueblos. Mas no hay que temer alaridos, cánticos o voces, (¿quién habla de asustarse?) porque hay niños que acunan sus muñecas con suspiros y crean mundos, (rompamos la rigidez de los dilemas) mientras fingen o sienten en invierno, primavera.
¡Felices y pacíficas Pascuas a todas las personas de buena voluntad, con especial cariño a las que leéis este blog. ¡Felices Pascuas!

viernes, 16 de diciembre de 2005

TIEMPO DE REGALOS

Estos tiempos que coinciden con el final de año, con la fiestas de Navidad nos llaman a la reflexión y a la celebración, pero también es cuando hay costumbre recordar, saludar, felicitar... y regalar.
Diferentes culturas comparten el pensamiento de que los regalos son una parte importante de nuestra experiencia humana. Desde un punto de vista antropológico, podemos decir que regalar es un acto social que tiene el valor de "generar y mantener relaciones". Cada interacción con otra persona es un intercambio: la cuestión es diferenciar si el intercambio es egoísta o altruista.
Aquellas personas que realizan intercambios altruistas suman relaciones y expanden su universo... y el de los demás, dejando un mundo más interconectado, colaborativo y generoso del que encontraron. Por el contrario, aquellas que sólo regalan sirviendo a sus intereses, "extraen" sus beneficios de los demás... produciendo escasez.
Para aprender a regalar, primero debemos modificar un paradigma que tenemos muy arraigado: regalar es comprar. Definitivamente, hace falta un proceso de adquisición para obtener un presente. Pero regalar es más que comprar... es comunicar. Preguntarnos ¿qué puedo regalar? es preguntarnos ¿qué quiero decir? y - a la vez- ¿qué quisiera "escuchar" de mí la otra persona?
Regalar no es hacer una compra, sino hacer un esfuerzo... Recuerdo una historieta a acerca de una maestra que trabajaba en un pequeño pueblo de una isla. En una playa - bastante alejada del pueblo- se encontraban enormes caracolas de preciosos colores. Un día, un alumno le regaló una de esas caracolas. La maestra estaba emocionada, pero preocupada le dijo a su alumno que no debería haberse alejado tanto del pueblo. A lo que el estudiante replicó "Pero maestra, mi caminata era parte del regalo".
Cuando regalemos o cuando nos regalen debemos tener en cuenta que es el gesto, la acción, y no el objeto, lo que importa. Lo más importante es el esfuerzo que realizamos al darle algo a alguien. Dicho con otras palabras, el regalo no es el precio sino lo que de nosotros hay en él. Lo determinante en el acto de regalar no es el dinero gastado, el tamaño, el envoltorio, ni la marca. Mucho más importante es la sensibilidad que invertimos. El valor es el significado que damos a algo y no su costo. Y ese significado se encuentra en nuestro corazón, en nuestra alma... y no en nuestro bolsillo.

miércoles, 7 de diciembre de 2005

TRES SONETOS A LA MÚSICA

MÚSICA ODISEA
Emoción de caminos invisibles
surcando, como Ulises, anchos mares
inmensos de aventuras y avatares,
que iza la vida a cielos más sensibles...

Gozo de libertad sin imposibles
que con bravura alcanza los lugares
de las islas que ahuyentan los pesares,
donde resuenan notas apacibles.

El silencio se tiñe de armonía.
Sobre los céfiros blandos ondea
con leve cadencia la melodía.

La música es la sangre que bombea
el corazón azul de la alegría.
La música es el fin de la odisea.


MÚSICA VIDA

Quiero hablarte. Si me hablas no te entiendo.
No es la armónica lengua cielo abierto.
La música sí es orden y concierto
que nuestra vida vive consintiendo.

La flor, como la nota, consumiendo
su preciso tiempo, deja cubierto
el aire con suave aroma incierto.
Mas la nota la estamos compartiendo.

La orquesta no nos duele en la cabeza.
Pues tú ya no eres tú y la alegre herida
de la risa nos une en la belleza.

Y yo ya no soy yo. La voz dormida
al universo grita su certeza:
las música nos sopla y nos da vida.


MÚSICA AZUL

No me duele el aire ni la tristeza
me duele. Ni me duele la aventura
de galopar de noche en la llanura.
La música me llena de certeza.

La armonía de la naturaleza
inunda con su luz la noche oscura
y acompasa los sueños con dulzura.
La música es la paz y la belleza.

Es del día la vibración sonora
la música real de las esferas,
que nos eleva con su melodía.

Pasión vital que canta, grita y llora
sorteando el pincel de las fronteras.
Nuestra música azul es la alegría.

Estos tres sonetos de Antonio Illán conforman las palabras que sustentan una composición musical de Jorge Badolato estrenada en el teatro Monumental de Madrid por la orquesta ODISSEA en el memorable concierto que tuvo lugar el día 3 de diciembre de 2005, bajo la dirección de Alex Shnieper y la supervisión de Nga Vu Thi.


LA CONSTITUCIÓN


La Constitución es algo tan aséptico que se define (RAE) como la Ley fundamental de un Estado que define el régimen básico de los derechos y libertades de los ciudadanos y los poderes e instituciones de la organización política.
En una sociedad de personas educadas, libres e inteligentes me parece un contrasentido que se esté utilizando el concepto de Constitución como cachiporra sentimental para mandoblear a diestra y siniestra. La Constitución es algo más serio, más relevante, más objetivo y más racional que un sentimiento. Reducir la Constitución a una emoción –a favor o en contra- es sembrar la semilla de la cizaña. Tan poco hacen estas posiciones por su defensa como las actitudes de aquellos que no quieren verla porque el árbol de su intransigencia y de su interés les impide ver el bosque de la solidaridad y la convivencia de un pueblo rico y diverso como es España.
Estos día en los que en todas partes se hacen homenajes, recuerdos, loas y celebraciones alrededor de la consensuada Constitución del 78, debiera tener todo el mundo la conciencia de que hay mucha formas con las que podemos aprender y enseñar maneras de abordar las diferencias y que la meta de nuestra Constitución no es otra que la de ayudar a crear una cultura cooperativa, una auténtica cultura de la tolerancia, la convivencia, la solidaridad y la justicia
Estos días de tanto mensaje cruzado, los que debieran dar ejemplo con sus actitudes y sus discursos debieran tener en cuenta que con sus actos y sus palabras no sólo pueden transmitir sentimientos, ideas o información, sino que también pueden cumplir la función social de “construir comunidad”.
Si la Constitución es la norma común que nos ampara, sería necesario que se superasen algunos determinismos de la razón, la conciencia, el libre albedrío, la imaginación, la educación, las fronteras o los ideales y se estableciesen acuerdos para vivir en paz, en vez de para pelear con el arma de la intransigencia y los dogmas. Las personas educadas, libres e inteligentes somos capaces de solucionar nuestros asuntos por otros medios que no son el garrotazo; pero tenemos que saber que la decisión está en cada uno de nosotros... y la responsabilidad también.
Este artículo se publica en la Revista AQUÍ

viernes, 2 de diciembre de 2005

OTRA DE LOES


Un amigo mío de cuyo nombre no quiero acordarme me dice que valora la palabra de labios sinceros, una mano tendida en el momento certero, oídos que escuchan sin prisa y sin pausa y un hombro donde apoyar la vida cuando la bajada es cuesta arriba. Pero también me dice, ¡oh! prosaico amigo, que la LOE no le gusta ni con retoques ni sin retoques, que le gustaba más la LOCE. ¿Te has leído alguna? –le pregunto-. Me dice que no, que no hace falta. Ahí te pillé, tunante, –le digo-. Tu dices que no te gusta por decir que no, como los del partido popular, por no apearte del burro. Un tercero que está en la cháchara, que tiene un punto de moderación que ya de chico parecía que había nacido con barba, tercia diciendo que la LOE, con los retoques de última hora –maquillaje, según unos, y bajada de pantalones, según otros- se parece tanto a la LOCE como una gota de agua a otra gota de agua. Pues, la verdad, puede que tenga razón, y como sigan aprobando enmiendas de ese jaez, el único distintivo que va a quedar en la LOE como divisa es el de la Religión sin asignatura alternativa.
Yo les digo que, al menos en Educación, las leyes no importa mucho que sean jurídicamente buenas o malas, pues quienes, en último término, las van a hacer buenas o malas son los profesores en sus aulas enseñando a los alumnos, las familias en sus casas exigiendo esfuerzo y haciendo trabajar a sus hijos, la Administración ofreciendo recursos –entre otras cosas- y, por supuesto, los propios alumnos si están por la labor del estudio.
Ellos me dicen que estoy en el limbo. Claro que yo me guardo una carta en la manga como defensa y les respondo: pues lo lleváis claro, porque acaba de decir el Papa que el limbo no existe. ¡Estupendo!, eso es estupendo –me dicen- para la Educación, pues si el limbo no existe, no habrá alumnos que estén en ese ameno lugar de distracción y acabaremos con el fracaso escolar, ¡viva el Papa por cargarse el limbo! Y vengan ¡Pisas! a corroborar nuestro éxito.
En mi escuela éramos cincuenta y tantos, había un solo maestro. Aprendíamos solidariamente mucho. No sé que leyes habría, pero todos salimos adelante con mucho más que las cuatro reglas y sabiendo leer y escribir correctamente.

martes, 29 de noviembre de 2005

SU MAJESTAD LA PERDIZ



El arte cinegético tiene en Castilla La Mancha un paraíso y las piezas cobradas en las correrías venatorias han surtido las mesas con verdaderas exquisiteces.
La cocina de la caza responde a una tradición culinaria que se hace diversa porque, con unos mismos fundamentos, en cada lugar ofrecen ese toque de distinción que hace que el venado de Los Yébenes sea diferente al de Ventas con Peña Aguilera o al de San Pablo de los Montes.
De entre todas las posibilidades, para guisar, que la caza nos ofrece, hemos elegido a la reina de pluma de nuestros campos, la perdiz roja.
De la perdiz ya habla, aunque poco, el clásico Ateneo y nos ofrece una sencilla receta que bien se puede aplicar en el verano y el otoño manchego, pues es tan simple como sigue: "después de limpiar el ave y haber vaciado sus intestinos, se rellena con unas lonchas de tocino, se envuelve en unas hojas de parra y se deja cocer sobre el rescoldo. Pero nosotros vamos a optar por centrarnos en la receta de más tradición y más éxito de cuantas han llegado a nuestras manos, la perdiz estofada, también llamada "a la toledana".

PERDIZ A LA TOLEDANA
Será menester que preparemos tres o cuatro perdices tiernas (más tiernas son las jóvenes y los machos), un par de cebollas grandes, un buen vaso de vino blanco castellano manchego, un vasito de aceite de oliva de la región, unos dientes de ajo, unas hojas de laurel y sal.
Se despluman y se limpian bien las aves, se atan con bramante como mandan los cánones (o no se atan, si no queremos), se dejan toda una noche en agua para que se desangren bien (en esto se nota que la receta es de origen judío). Puestos a estofar, conviene que lo hagamos en una olla de barro. Sazonamos bien las aves, las bañamos con paciencia y detenimiento en el aceite de oliva, las colocamos en la olla, añadimos las cebollas en rodajas finas, los dientes de ajo enteros y las hojas de laurel, dejamos que rehoguen unos minutillos y luego añadimos el vino blanco (que conviene que sea seco y esté sentado). El secreto ahora consiste en que cuezan muy lentamente, con la olla tapada, por espacio de un par de horas.
Servidas bien calientes y con unas patatitas cocidas y rehogadas en aceite con un espolvoreo de cominos y laurel, es manjar de popular prestigio y altas ocasiones, es decir que cualquier ocasión es buena para alzar un plato con tan suculento guiso.
(Receta dedicada al sin par Dustiano, Señor de Valle Moral y del Cerrillo, Marqués del Guindillo y Conde de la Raña Matazorras)

lunes, 28 de noviembre de 2005

ODISSEA EN EL MONUMENTAL DE MADRID



Un excelente concierto. Una excelente orquesta y una obra musical sobre unos interesantes sonetos dedicados a la música.

LA LOE


Si la coherencia fuera un valor que tuviera como objetivo el beneficio de los ciudadanos, la LOE no debiera ser campo de batalla de la pura y simple refriega política. Si las personas que tanto critican el texto se lo hubieran leído y se hubieran leído también la LOCE –a la que tanto alababan-, se darían cuenta que una y otra no son el haz y el envés, sino que la LOE supone una adaptación más cercana a la realidad, una superación del mercantilismo educativo y una propuesta de equidad. Actuar en un ámbito tan importante y complejo como la educación requiere un elevado grado de consenso entre la comunidad social y los profesionales de la educación.
La estrategia discursiva de la derecha y de ciertos sectores recalcitrantes o interesados vincula la calidad a la ley. El problema de la calidad no se resuelve en un articulado jurídico, sino con el compromiso de los profesionales con su práctica educativa adaptada a los alumnos que esta sociedad produce con su diversidad de circunstancias, motivaciones e intereses. La calidad está en la familia, que no debe hacer dejación de su propia responsabilidad en relación con la exigencia, el trabajo y el esfuerzo que tienen que llevar a cabo sus hijos, pues los avances en el estudio no se producen por inspiración divina, sino con el afán por aprender.
Se vierten falsedades sobre la LOE y es preciso subrayar que esta ley pretende asegurar a los padres la libre elección de centro, mientras que algunos de sus críticos buscan que sean los centros los que elijan y segreguen a los alumnos. La LOE es garantía de igualdad y de libertad y tiene como objetivos: ofrecer una educación de calidad para todos, combatir el fracaso escolar, aumentar las oportunidades educativas, garantizar las libertades y derechos constitucionales, propiciar el esfuerzo individual y colectivo y vertebrar el sistema educativo mediante mecanismos de cooperación.
La LOE garantiza el derecho de los padres a la elección de centro, sin más limitación que las plazas disponibles en cada uno de ellos, garantiza el mantenimiento de los conciertos educativos y el derecho a la enseñanza de la religión tanto en la escuela pública como en la privada, y ello significa libertad tanto para los padres que quieren que sus hijos estudien religión como para los que no la quieren.

Artículo publicado en la Revista AQUÍ. Toledo. Castilla-La Mancha

sábado, 19 de noviembre de 2005

RECETA DE CALDERETA DE CORDERO




Este andador de caminos,
que bien conoce esta tierra,
quiere ofreceros a todos
la suculenta receta
que, teniendo muchos nombres,
el mejor es CALDERETA.
Buena carne de cordero
es la condición primera,
sea pascual y con hueso,
en tajaditas pequeñas.
Prepárese también fuego
más sartén y espumadera,
ajos, sal, aceite y vino
y unos granos de pimienta,
una hojilla de laurel,
tomate frito y...paciencia.
Los pasos que hemos de dar
tienen la siguiente cuenta:
primero vaya la carne
saladita a la cazuela,
luego venga encima el agua,
¡ha de quedar bien cubierta!;
enciéndase el fuego entonces
y dejémoslo que cueza,
espumando lo preciso,
tanto como falta hiciera,
hasta que el caldo consuma
en esta cocción primera.
Espumar y gastar caldo
en esta primera vuelta
es de todo punto justo
para desgrasar la esencia.
De segundas venga el guiso,
¡más vale maña que fuerza!,
échese sobre la carne
vino blanco de la tierra,
suficiente será un vaso,
más, quizá pasarse fuera,
vayan los ajos partidos,
no menos de una cabeza,
un chorro de aceite crudo
sin que nos llamen miserias,
dos hojitas de laurel,
bolas de pimienta negra,
tomate frito, si os gusta,
si no os gusta, quede fuera;
cúbrase otra vez con agua,
déjese que cueza y cueza
hasta que quede salsilla
y la carne esté bien tierna.
Pruébese de sal entonces,
ahí está el punto y la ciencia.
Si atinamos con la alquimia,
este plato es una fiesta,
para chuparse los dedos,
arrebañar la cazuela
y traer hasta el recuerdo
la grande patria manchega,
que nos donó los manjares
que nos adornan la mesa.
Quede el toma pan y moja
o la tajada postrera
para traer a las mientes
al gentil romanceador
que romanceó estas letras

miércoles, 16 de noviembre de 2005

LATIN KINGS


Leer no es una obligación, es una necesidad personal y social y, por tanto, su aprendizaje, genera un derecho. La lectura y la escritura son artículos de primera necesidad en la sociedad, tan importantes como el alimento, la vivienda o un trabajo digno.
La lectura y la escritura, procesos indisolublemente unidos, suponen la puerta de entrada al conocimiento, la información y la imaginación. Por eso, cuanto antes podamos penetrar en ese universo mucho mejor.
Hoy quiero unir el hecho de leer con el fenómeno de la violencia. ¿En qué sentido? Recomendando la lectura del libro “Reyes Latinos”, de los periodistas Santiago Botello y Ángel Moya, en el que se cuenta, y bien, por cierto, cuál es la situación de las “bandas organizadas que delinquen desorganizadamente” y que agrupan a numerosos jóvenes, como, por ejemplo, los “Latin Kings”.
Hasta ahora, los "Latin", que, como sabemos por los medios de comunicación, actúan en Madrid y otras ciudades como Barcelona, Valencia o Valladolid, se dedican a delitos menores como pequeños robos y extorsiones -intentaron el trapicheo con droga pero fueron expulsados por los gitanos- y han mostrado su extrema violencia en enfrentamientos, con varios muertos ya, con la pandilla rival de los "Ñetas".
Con esa lectura nos podemos enterar de cómo funcionan estas organizaciones y lo peligrosas que son para nuestra juventud. Así sabemos que estos pandilleros llevan armas cortas, se enfrentan por el control del territorio (parques, bares y zonas de esparcimiento) en las ciudades donde actúan, se rigen por códigos secretos, adoptan toda una parafernalia de colores, gestos y normas y se comprometen a no abandonar nunca la banda, so pena de muerte. Son, en su mayoría, ecuatorianos, aunque también hay peruanos, dominicanos o colombianos, hijos de familias desestructuradas cuyos progenitores los dejaron en el país de origen mientras buscaban mejor vida en España, y ahora, al traerlos consigo, apenas pueden ocuparse de ellos. Hay, también, algunos españoles, sobre todo chicas.Es cierto que la lectura no siempre se recomienda como entretenimiento, al menos en este caso. Sino por el interés que ofrece para el conocimiento de una realidad que estamos ya sufriendo y por la necesidad de poner los pies en el suelo del conocimiento y no culpar a la generalidad de la juventud de los desaguisados que cometen unos pocos, quizá los que, ¡ay!, menos leen.

miércoles, 9 de noviembre de 2005

VIOLENCIA SOCIAL

Una ola de violencia se ha desatado. Los barrios periféricos de las ciudades francesas están que echan humo. Alguien dice que, por mimetismo, esta violencia se extiende. Ya han ocurrido casos parecidos en Sevilla. Pero hay más violencias de tono menor que están ahí y, a veces, las llamamos simplemente gamberrismo o ajuste de cuentas entre mafias o bandas urbanas, como en Madrid. El hecho es que la violencia social está subiendo de tono. Y no se puede caer en el análisis superficial ni en la opinión de que es una violencia provocada por la inmigración solamente, ni por la confrontación de culturas o de religiones. La violencia está evidentemente generada por los núcleos sociales con menos expectativas vitales. Es, parece, la violencia de los pobres que tienen la imposibilidad de gozar las excelencias del mundo mercantil que les rodea.
Esta revuelta civil francesa no es en absoluto equiparable a aquella del mayo del 68, la de los estudiantes ilustrados y los trabajadores con empleo, con ideología de izquierdas y la vista puesta en la utopía de una sociedad mejor. Los disturbios de hoy son otra cosa. Los jóvenes que ahora queman coches son mayoritariamente trabajadores sin trabajo, estudiantes sin perspectiva, habitantes de barrios suburbiales y personas marginales del sistema feliz de mercado desencantadas de vivir en un mundo que les ofrece a la vista el lujo y la opulencia que son imposibles de gozar, personas que habitan allí donde menudea la droga, el delito, el trapicheo, la discriminación, el abandono y la miseria.
La retórica de la igualdad de oportunidades es eso, retórica. Y la retórica lo que hace es poner de manifiesto las evidentes desigualdades y exasperar los ánimos. Habrá que ir, por tanto, no a la grandilocuente e idílica alianza de civilizaciones, sino a soluciones más terrenas, más reales. No se puede justificar la violencia en condicionantes conceptuales del tipo: hay personas que son naturalmente violentas, o hay culturas que se enfrentan. Natural y culturalmente, las personas tenemos el mismo potencial de ser violentas, que pacíficas. No estamos más determinadas a pelear y destruirnos, que a colaborar, establecer acuerdos y vivir en paz. Así como somos capaces de generar crueles guerras y dañar seriamente a otras personas, somos capaces de resolver nuestras diferencias por otros medios. La decisión está en cada uno de nosotros... y la responsabilidad también. Pero más que en cada uno de nosotros, como personas aisladas, la solución debe venir por correcciones de un sistema social que acentúa las diferencias entre los que tienen abundantes expectativas de desarrollo y los que sólo tienen delante la vía que conduce al fracaso. Ahí si hay armas de destrucción masiva. Algo habrá que hacer por aquí para prevenir lo que se nos puede estar viniendo encima, pues, como dice el proverbio: cuando las barbas de tu vecino veas quemar pon las tuyas a remojar.

jueves, 3 de noviembre de 2005

GUÍA PARA CHICAS


La tan comentada y poco conocida “Guía para chicas” es un texto que no merece tanta escandalera como la que ha provocado. Hay que leer con las neuronas un poquito retorcidas para sacar conclusiones tan atrevidas como las que algunos han puesto en su boca. En las páginas se describen algunas situaciones, relacionadas con la sexualidad y con los afectos, que están ahí, en la realidad, que son conocidas y sustentadas en la tradición al menos desde la poetisa griega Safo. Que yo sepa las mujeres tienen cuerpo y sexualidad propia, lo mismo que los hombres. Y quienes ahora se escandalizan no parece que lo hagan cuando leen que el bíblico Onán “derramó” fuera, ni cuando Torrente le dice al compañero que se van a hacer unas pajillas. Al menos yo no he sentido a ningún padre de la iglesia ni a ninguna persona de las que ponen el grito en el cielo en cuanto les tocan el sexto que se hayan tirado al monte del discurso para retirar la Biblia de la lectura inteligente o que hayan prohibido ver las casposillas películas de Santiago Segura. Lo que no comprendo, aun respetando todas las opiniones, aunque muchas no las comparta, es que quienes más se escandalicen sean aquellos que pretenden seguir imponiendo su moralina y su estrecha visión del sexo a sus semejantes.
En mi opinión la “Guía para chicas” es un texto que debe leerse con sentido crítico, como todos los textos; es un texto que no debe tomarse como un catecismo, sino como una opinión que viene de donde viene, que, además, pone sobre la mesa algunas cuestiones objetivas evidentes sobre sexualidad y sobre afectos. El lector crítico es el que aplica la razón y la libertad, lo demás es censura. Y se debe educar para adquirir sentido crítico y evitar cualquier manipulación, venga de donde venga. La censura, en cambio, es la antieducación.
Y para mojarme más, pensando lo que digo y diciendo lo que pienso, si alguien me preguntase si pedagógicamente tiene interés la Guía, yo digo que, para mí, no, porque a una clase mixta, si quiero educar en la igualdad, yo no llevaría nunca una “guía para chicas”, como tampoco llevaría una “guía para chicos”. Pero esto es como todo, opinable, y cada maestrillo tiene su librillo.

viernes, 28 de octubre de 2005

EL QUIJOTE Y ESPAÑA


Acabo de llegar de El Toboso (Dulcinea), y de Campo de Criptana (molinos). He comido en Barataria con un grupo de bienpensantes. Hemos conversado sobre España en el Quijote. Había quien sostenía que don Quijote hablaba con un lenguajes arcaico, vestía armas de su abuelo y fantaseaba con realidades ficticias. Ese contraste entre el héroe y el tiempo real de los lectores en la época de Cervantes es lo que hace del Quijote un libro de humor.
No hay verdades absolutas y algo de razón llevaba quien esto afirmaba. Sin embargo, yo soy más de la opinión de quienes piensan que el Quijote es un texto plenamente anclado en su presente (finales del XVI y principios del XVII). El texto está arraigado en su época y su lugar (La Mancha). Nada de un idealismo ahistórico. Si leemos con atención encontraremos que la obra reproduce a la vez que cuestiona certezas epistemológicas e ideológicas de la España de su tiempo. Con ser sólo un lector atento, se puede apreciar cómo don Quijote entabla un diálogo desasosegante con las instituciones y los debates sociales, políticos, económicos y culturales más importantes de su época: guerras extranjeras, política de raza, género y clase social, crisis monárquica, consolidación imperial, expulsión morisca, Inquisición, ansiedades mediterráneas, inflacción económica y bancarrotas, decadencia política y militar, razón de Estado, peste y hambre, expansión de la imprenta, autoría, emergencia de nuevos lectores y nuevos tipos de lectura y un largo et caetera. Es decir, que podemos afirmar, a contrapelo de otras lecturas canonizantes o monumentalistas, que el Quijote nos revela la suma complejidad de la España -o las Españas- de su tiempo.
La España del Quijote es un territorio de ricas contradicciones. Se trata de un momento de transición, en el cual convivían rastros del humanismo reformista al lado de una nueva ortodoxia contrarreformista; un punto de estética renacentista y otro de estética barroca, escepticismo y secularismo frente a actitudes y tradicionalismos reacios; en fin lo que podemos entender como una crisis de valor y de sentido.Animo a leer el Quijote con sentido crítico, para saber más y tener criterio cuando se hable de él; pues abundan papanatas que opinan con desparpajo sin haber leído más allá de aquella línea en la que se dice. “...de cuyo nombre no quiero acordarme”.

miércoles, 26 de octubre de 2005

A VUELTAS CON LA LECTURA


Si yo tuviera que formar a los profesores y a los padres a propósito de la enseñanza y la animación a la lectura, no me andaría con zarandajas, pondría en sus manos tres libros, a saber: “Como una novela” y “ La pequeña vendedora de prosa”, de Daniel Pennac, y “La magia de la lectura”, de José Antonio Marina y María de la Válgoma. Les instaría a que leyesen estos libros con atención y que pusieran en común, unos y otros, sus sencillas conclusiones.

La lectura es la magia más poderosa y magnífica, capaz de transformar, de conmover, de procurar al hombre un renovado impulso hacia el conocimiento, en una aventura sin igual. Los de Pennac, para mi, son libros de cabecera. El más reciente de Marina y de la Válgoma, que acaba de ser publicado, también lo es ya. Los siete capítulos de este último resumen el evidente propósito pedagógico que atesoran sus páginas. Se parte de un hecho: "La magia de la lectura". Para a continuación ir adentrando al lector en una serie de confidencias e inquietudes. La meta es que los que están a nuestro alrededor avizoren los peligros que tiene la orilla de su existencia si no son capaces de leer con precisión su geografía. Y los libros son los mapas con los que debemos contar para no encallar en las peligrosas costas del desánimo o del tedio, en una vida sin alma, sin sueños, sin fantasía.

Los autores proclaman la necesidad de "una conspiración de los lectores", como parte de un todo más amplio en el gran universo de la educación. Que los niños vean leer a los padres y a los profesores (el ejemplo es fundamental), y que nadie pueda pensar que leer es una pérdida de tiempo, un desliz, un asunto poco práctico.

En este "tratado de magia" no hay conjuros vanos. Es, en definitiva, un tratado de amor. Porque eso es, en definitiva, la lectura: un progresivo enamoramiento. El hombre está hecho para amar, es decir, para ir deletreando los fonemas de los sentimientos. Por eso nos encanta escuchar historias, o recogernos en la intimidad de la lectura, en el regazo de su silencio. La lectura es como el amor, una manera de ser.

Razones para leer, la dificultad de leer, la magia del lenguaje, etc. Todo está aquí. Leed estos libros para aprender a enseñar.

lunes, 24 de octubre de 2005

TAJIBO


Ya me gustaría que mi querida ciudad de Toledo llenara sus calles de tajibos en vez de soportar el arboricidio constante en el que la sumen sus mandatarios.

miércoles, 19 de octubre de 2005

¡¡AMÉN!!


¡Qué cosas tiene la vida! Yo creía que andaba bien de cabeza y resulta que me he reencarnado. El del cigarro es mi amigo Dustiano, una enciclopedia viva de dichos y anécdotas. Los dos fuimos monaguillos antes que frailes. Compartimos mangas y estandartes, nos une la pasión de la amistad y el amor por Los Navalucillos.

TIRARSE COMO GATO A BOFE

Dicen en mi pueblo –Los Navalucillos, por cierto- que “procesiones, sermones y sopas... pocas”. Este proverbio manifiesta la desconfianza en el poder nutritivo de las sopas y, por extensión, se aplica también a quien nos come el tarro con discursos vanos, machacones y vacíos. También dicen allí: “pintó melón y fue calabazón”, y con esta expresiva metáfora hortelana se afirma el asombro que produce la conducta de ciertas personas a quienes se las creía muy buenas, que prometían, y luego dejan mucho que desear. En la connotación de estas frases podemos encontrar un cierto matiz político, ya que los que tal disciplina profesan suelen abundar en promesas para luego olvidarse.
Aprovecho la ocasión a propósito del famoso estatuto catalán que tantos “sermones” provoca, de los que tan hartos empezamos a estar, porque no vemos una clarita entre tanto nublado. Claritas no, pero calabazones sí que están empezando a aparecer llenos de intereses insolidarios. Incluso hay cabezas cucurbitáceas que elaboran declaraciones de principios para que en los medios de comunicación sólo se emplee el término “nación” para cuando haya que referirse a Cataluña y, en cambio, a España nunca se la denomine “nación”. Claro que luego estos mismos, en asunto de perras, están que se tiran “como gato a bofe”, pues conocida es la afición de los felinos por la carne y como quiera que siempre están alerta de las posibles presas, no les importa sacar la mayor tajada del plato del estado.
Si esto del estatuto sigue adelante, lo más importante no será lo de nación sí o no, sino el asunto de los beneficios y el bienestar, algo que nos hará más desiguales. Y si dejamos que esto prospere, estos nacionalistas estatutarios “van a comerse hasta la custodia”, conocida su voracidad financiera, pues lo que pretenden, como dice mi amigo Dustiano, es ir a “comer a lo mío y hacer el nido a lo de Román”, que, según me explica este sabio de los dichos con una anécdota de cierto labrancero que se quejaba de la costumbre de algunos pájaros que inexorablemente iban a comer en su sembrado para después anidar en la finca de su vecino Román, dejando para éste la utilidad.
Yo, en el famoso estatuto y sus circunstancias, veo esto y así lo explico con el lenguaje de mi gente.

lunes, 17 de octubre de 2005

La ratio de mi escuela


Mi maestro se llamaba José Antonio y era estupendo. Éramos más de 50 alumnos de diferentes edades y aprendimos ¡ni se sabe! Unos enseñábamos a otros, éramos solidarios sin haber empleado nunca la palabra solidaridad. Yo llegué a la escuela a los 6 años y ya sabía leer, porque me había enseñado mi madre. Éramos disciplinados y teníamos afán por aprender. Leí todo lo que caía en mis manos.
¡Gracias maestro! buena parte de lo que soy te lo debo a ti.

jueves, 13 de octubre de 2005

Fray Betto


He tenido la suerte de estar en el acto de entrega del II Premio Internacional “Abogados de Atocha”, instituido por la Junta de Comunidades para reconocer la labor de personas e instituciones que destacan en la defensa de los derechos humanos, así como en la lucha por las libertades públicas. El galardón ha recaído, con sobrado mérito, sobre Fray Betto –o Carlo Alberto Libanio Christo-, un fraile dominico brasileño cuya vida incluye hambres, persecuciones, cárcel, exilio, amor por la humanidad y, sobre todo en los últimos tiempos, un impulso al programa de gobierno brasileño “Hambre cero”.
Él ha dicho que “El Programa Hambre Cero es una versión en acción política de un gesto evangélico: la multiplicación de los panes, la posibilidad que tendrán todas las personas de acceder a condiciones mínimas de vida, que les imprima dignidad. Principalmente a las dos más elementales: beber y comer, sin las cuales ningún ser humano puede vivir y mucho menos tener dignidad. Es un escándalo para nosotros, hijos de la modernidad, ya entrando en la post-modernidad, que asistimos a tantos progresos científicos y tecnológicos, observar un hecho que agrede nuestra humanidad: las multitudes que pasan hambre”.
Este dominico me ha parecido siempre interesante por su doctrina, por su vida, por sus hechos y por sus libros. Fray Betto es un teórico con una cultura enciclopédica y un discurso con un poder encantador maravilloso, pero también es un ejemplo de la religión con los pies en el suelo, que sigue a rajatabla aquello que decía Santo Tomás de Aquino: "No se puede exigir la práctica de las virtudes a quien pasa hambre".
De entres sus libros, quiero recordar tres: “Bautismo de sangre” (1983), “Fidel Castro: mi fe” (1986), (libro que recomiendo a ateos y a creyentes, pues se trata de una extraordinaria entrevista al líder máximo cubano sobre el problema religioso) y el escrito conjuntamente con Leonardo Boff, “Mística y espiritualidad” (1995).
¡Ojalá! el premio concedido sirva para que se conozca más la labor de Fray Beto, sobre todo por la asentada clase dirigente, para que comprendan que sin pan no hay paz, porque la paz, como denunció el profeta Isaías hace casi tres mil años, necesariamente debe ser hija de la justicia. En ese sentido, el Padre Betto y el Programa “Hambre Cero” lanzan también las semillas de la Violencia Cero. ¡Un ejemplo!

Artículo publicado en la revista AQUÍ (14/x/2005)

miércoles, 12 de octubre de 2005

Fiesta Nacional

Este blog nace en el día que en mi infancia se conocía como "Día de la Raza" y que luego se denominó "Día de la Hispanidad". Hoy es 12 de octubre, la Fiesta Nacional, aunque sean precisamente los nacionalistas los único que no la celebran.
Este Blog será una ventana crítica por la que se aventará la libertad de expresión propia de la persona con criterio, con pensamiento, con discurso y sin miedo a expresarlo.
Así mismo, en este blog aparecerán los artículos que vaya escribiendo en los diferentes medios de comunicación con los que colabore.

¡Libertad, dignidad y justicia!

Antonio Illán "El Mágico de Toledo"